Soy Antonio. Tu enfermero

Estoy convencido de la necesidad de ayudar a los demás y comprometido con el reto de cuidar y de enseñar a cuidarse. Quiero que tengas la tranquilidad de saber que no estás solo.

¿Quién soy?

Soy enfermero colegiado de profesión (Colegio de Enfermeros de Madrid nº63.987) y  cuidador por vocación. Más de 10 años avanzando junto a la profesión en los tratamientos más innovadores. Ser enfermero a domicilio me enseña cada día que amar es cuidar. Cuidar de los tuyos, los más importantes. 

Observador por naturaleza. Una década recorriendo hospitales me ha enseñado que ser enfermo no es una condición sino un estado temporal.

El buen trato y un óptimo cuidado por profesionales en colaboración con la familia durante este período permiten al paciente una pronta recuperación, pero sobre todo: refuerza su autoestima. Compañía positiva e información profesional. Saber que estás en buenas manos

Seré tu enfermero una hora a la semana, pero te enseñaré a cuidarte responsablemente las 24 horas del día

Te cuido a ti, pero también a los tuyos

El simple hecho de tenerme cerca, ya ayuda a tus familiares. Compartir responsabilidades alienta y reconforta. El enfermero asume el liderazgo profesional para ofrecer al paciente una atención de calidad y libre de riesgos.

Educación del paciente

La clave es que el paciente entienda su enfermedad y su impacto. Un asesoramiento profesional junto con técnicas de modificación de conductas mejorará notablemente la calidad de vida del paciente. Tu enfermero a domicilio tiene el gran reto de convertirse en «su» guía, liderando su autocuidado. ¿El objetivo? Que el paciente logre controlar, conocer y responsabilizarse de su enfermedad. Capacitar al paciente para que conozca su enfermedad y saber cómo actuar en casos puntuales.

Acompañamiento al hospital o centro de salud

En muchas ocasiones, por falta de tiempo, los familiares del paciente no pueden estar presentes todo lo que desearían. Por este motivo, la ayuda de un profesional es fundamental. Ciertas pruebas diagnósticas o intervenciones quirúrgicas requieren ir acompañado. Delegar responsabilidades en expertos ayuda a la salud emocional del cuidador.